11.4.08

¿Ya soy mayor?


Cuando sea mayor querré ser...
Cuando sea mayor me gustaría tener...
cuando sea mayor me gustaría hacer...
Cuando no éramos tan mayores... que nos gustaba hacer?

A lo largo de nuestra vida, el ser felices varía con nuestras perspectivas de futuro!

No es que sea un vejestorio, o me sienta como tal, ni mucho menos. Pero es que cuando uno mira hacia atrás se da cuenta del camino recorrido, que no es poco, pero tiene la sensación de que ha durado lo mismo que un rico helado en verano, o que una birra bien fría en un día infernal de calor, o un cigarrillo a un "ex ex fumador" que hace tres días intentó dejar de fumarlo y hoy se da por vencido por las circunstancias y recurre de nuevo a ello porque ve que sus fuerzas se menguan en determinados momentos de su vida, en los que uno se siente azotado por algún que otro aspecto el cual no esperaba.

Y es que el tiempo va a la velocidad de la luz. Y digo esto porque me vienen a la memoria canciones que tratan de esto. "Ahora soy mayor", "When I was Young" de los Ramones. Personas que pasan por este punto en su vida en el que tratan de replanterse lo recorrido. ¿Iremos en buena dirección? ¿Habrá merecido la pena todo lo que he hecho? ¿Podría haberlo hecho mejor? Hay un amigo que dice "No importa el tamaño de tus pasos siempre que sepas que estás en el camino"

Tratas de observar a los demás y preguntarte por lo que hacen. Y cuando te das cuenta, en realidad no preguntas porque estés interesado en lo que hace la persona, por supuesto que sí estás interesado en lo que hace la persona, pero a lo que me refiero, es que en realidad preguntas por ti mismo. En seguida vienen a tu mente mensajes de sí lo que está haciendo él es lo que quizás te hubiera gustado hacer a ti, si lo que haces lo haces bien, si podría darte otro punto de vista y variar la visión de las cosas para actuar de diferente manera... siempre nos comparamos. Es irremediable!!! El único consuelo que acepta todo esto, es que lo haces para mejorar, no para alimentar tus envidias y hundirte en lo más hondo. Que también es irremediable en algunas ocasiones sentir esto, pero hay que saber que esto no lleva a ninguna parte.

En fin, a lo que íbamos, me entró la nostalgia de aquellos tiempos en los que uno se lo pasaba en grande jugando a las canicas, a la peonza, al escondite, al no retroceder, al un dos tres pollito inglés, jugar al rol, montar en bici, monopatín... íba por rachas y tu te especializabas en cada una de ellas para fardar con tus amigos de todo lo que podías hacer. Todo lo que importaba era gozar el día a día, minuto a minuto, sin ver más allá, sin preocupaciones. Vivíamos el presente!!!

Sin embargo, ahora todo es diferente. Que si tengo que entregar prácticas, hacer exámenes, currar para pagar una multa... y en brevas pagar seguros de coche y el hogar, la hipoteca de treinta, cuarenta y hasta cincuenta años, la factura de móvil, esas copas que valen como si fuesen oro líquido, pero dejan una resaca al día siguiente que uno quiere morirse y maldice porque mañana no podrá jugar a las canicas... porque tendrá que seguir pagando la luz, el agua, el pediatra, los niños, libros, medicamentos, infinitos regalos en las bodas, ropa, más multas que me pondrán en el futuro... ¿Y al final qué queda? Pues la esperanza de que se acabe pronto el mes para que empiece el siguiente, esperando a que nos ingresen la nómina que antes de que entre en la cuenta ya estará gastada y así se irá esfumando nuestro tiempo.

¡Suena triste verdad! Tranquilo porque siempre tendrás los fines de semana en los que disfrutarás de tu libertad a medias, arregla esto de casa, lleva al niño al fútbol, pinta las paredes que ya están viejas... pero lo disfrutarás y cogerás fuerzas para la semana siguiente.

Todos nos decían que no iba a ser fácil, pero nadie nos dijo que sería tan difícil. Que esto de crecer es una revolución interna, es un constante cambio de planes, es una necesidad de ser distinto sin dejar de ser uno mismo. Que es una cuestión muy personal, pero que puede involucrar a mucha gente o a poca gente, pero en definitiva, a la gente que nos importa.
Nadie nos dijo que había muchos sentimientos, a veces muy contradictorios. La necesidad de estar enamorado, la necesidad de que ese amor sea correspondido.

Saber muchas cosas, aprender tantas otras, de eso se trata crecer y, en alguna forma, de eso se trata la vida. De eso se trata la vida... elecciones, crecimientos, aprendizajes. No podemos crecer sin dejar inevitablemente cosas atrás, deshacernos de las viejas creencias, de las cosas que nos limitan, animarnos a salir de nuestras zonas de comodidad para correr algún riesgo.

¿Que es difícil? ¡Claro que lo es! Pero la sensación de haber atravesado algo importante, de haber enfrentado algo que nos costaba, de haber salido adelante, es única.

Así que... creo que es el momento de no seguir mirando siempre al futuro, ese que nunca llega, ese en el que nunca encuentras lo que buscas en tu vida, ese que cuando llega no se parece ni de lejos a como lo habíamos imaginado, y dedicar unos instantes a disfrutar del presente, porque amigos es lo único que tenemos con seguridad. El hoy, el ahora, y os puedo asegurar que merece la pena vivirlo, aunque sean cinco minutos al día porque las circunstancias no permiten una mente clara a lo largo la vida, porque aunque la vida en realidad es una mierda... me gusta estar vivo!!!!

El tiempo es demasiado lento para aquellos que esperan...
demasiado rápido para aquellos que temen....
demasiado largo para aquellos que sufren....
demasiado corto para aquellos que celebran...
pero para aquellos que aman,
el tiempo es eterno "
No sueñes tu vida y vive tu sueño!

Analicemos menos, y disfrutemos del poco o mucho crecimiento que cada uno de nosotros pueda hacer, porque si hay algo claro, es que ya puede ser grande o pequeño, pero sigue siendo crecimiento!

No hay comentarios: